Chambira: la oportunidad económica que promueve bienestar y conservación del Área de Conservación Regional Ampiyacu Apayacu

septiembre 30, 2024

Cuando hablamos de la Amazonia peruana, indudablemente pensamos en Loreto; esa inmensa región del lejano oriente que siempre hemos coloreado de verde desde nuestra infancia. Y es que efectivamente, en sus más de 350,000 kilómetros cuadrados (28% del territorio de Perú), se encuentran 29 áreas protegidas con una biodiversidad inigualable. Pero proteger un espacio tan inmenso y desafiante como Loreto, es un reto enorme.

Desde el 2022, Conservación Internacional ha asumido este reto, buscando la articulación con diversos actores que participan del Sistema Regional de Conservación de Loreto a fin de articular alianzas a favor de la conservación. Solo en el Área de Conservación Regional (ACR) Ampiyacu Apayacu se encuentran 1500 especies de plantas, 207 especies de peces; 64 especies de anfibios; 40 especies de reptiles; 362 de aves y 60 especies de mamíferos, que conviven con cuatro pueblos indígenas: los Yagua, Bora, Huitoto y Ocaina.  

 

Salvaguardar la naturaleza de este espacio, significa también generar condiciones económicas favorables para su conservación y el bienestar de la población local. Una de las actividades productivas que más acostumbran las 8 comunidades asentadas en la cuenca del Ampiyacu, es la cosecha del cogollo de la palmera de chambira (Astrocaryum chambira), una fibra natural cuyo uso y conocimiento se viene compartiendo de generación en generación. Los hombres contribuyen en la cosecha y traslado del cogollo, mientras que las mujeres habilitan la fibra para su tejido y elaboración de artesanías, actividad a la que se vienen sumando los varones.

Transformando la producción

Junto con nuestro socio Amazon Ecology, quienes ya venían trabajando en la zona desde el año 2006, se aprovechó para construir mejores oportunidades para los y las artesanas. A través del interés por la chambira se aprovechó para fortalecer importantes habilidades de liderazgo, mercadotecnia, y resolución de conflictos para conformar organizaciones más sólidas y capacitadas, mientras que también se fortalecen sus técnicas en elaboración de tintes naturales, tejido, acabado y diseño.

Analizamos la cadena de chambira y vimos que no era una actividad sostenible. El cogollo de la chambira se cosechaba tumbando la palmera. Introducimos nuevas herramientas y trabajamos con las familias para enseñarles cómo obtener únicamente el cogollo y mantener la palmera en pie”, nos comenta Bibi Gutiérrez, coordinadora intercultural de Conservación Internacional Perú.

© Conservación Internacional/Gustavo Carrasco

Los artesanos debían caminar cada vez más lejos para llegar hasta la chambira así que se reforestaron 5600 plantones en las parcelas de más de 50 familias de las comunidades de Boras de Pucaurquillo, Huitotos de Pucarquillo y Brillo Nuevo, facilitándoles un mejor acceso al recurso. Además, ahora las familias saben que cada tres meses, pueden cosechar un nuevo cogollo de las palmeras que antes tumbaban.

Con el apoyo que hemos recibido, nos han ayudado a tomar conciencia para manejar sosteniblemente nuestra flora y fauna”, nos cuenta Raquel Velásquez, artesana de la comunidad nativa Huitotos de Pucaurquillo. “Antes caminábamos más de dos horas para poder llegar a las palmeras de chambira, que, sin saber, tumbábamos. Ha sido una gran experiencia trabajar en la reforestación de la chambira para que nunca nos falte, y así poder transmitir a las futuras generaciones, esta práctica de nuestros ancestros. Ahora estamos mejor organizados y trabajamos para sacarle un mejor provecho a la chambira y tener mejores beneficios para todos”, añade Raquel entusiasta.

Fomentando la trazabilidad de la chambira

A través de Amazon Ecology se comercializan, tanto a nivel nacional como en el extranjero, las artesanías de las 6 asociaciones de artesanos con quienes se viene trabajando, pero ha sido un proceso de largo aliento; “Al inicio ya casi no encontrábamos las semillas de chambira. Pero con mucho esfuerzo hemos logrado que cada una de las 50 familias tenga su propio vivero. Luego de muchos intentos hemos identificado y aprendido el momento adecuado para replantarlo en sus parcelas para que pueda crecer bien”, nos comenta Jully Rojas, Coordinadora de campode Amazon Ecology.

© Conservación Internacional/Esteban Fong

Una vez reforestadas las palmeras de chambira, se trabajó con la jefatura del Ampiyacu Apayacu y la Gerencia Forestal del Gobierno de Loreto para contar con un registro de plantación de todas las palmeras sembradas en las comunidades de Boras y Huitoto de Paucarquillo, siendo éstas, las dos primeras comunidades de toda la región de Loreto en contar con dicho registro.

El registro también abre nuevas oportunidades. Con estos documentos, los artesanos tienen ahora la oportunidad de acceder a programas de compensación por competitividad del Estado, fondos concursables que pueden fortalecer su gestión empresarial con nuevas tecnologías agrarias ambientalmente sostenibles y mejorar su competitividad y calidad de vida.

 

Un futuro promisorio

© Conservación Internacional/Gustavo Carrasco

Cada vez hay más semillas y una población local más interesada en sumarse al trabajo que se viene haciendo, pero en muchas otras comunidades aledañas, donde va aumentando el interés por trabajar la chambira, aún escasea la presencia de esta palmera.

Continuar con sus plantaciones y con su debido registro en otras comunidades es prioritario. Con la tecnología que hoy permite al comprador ubicar con coordenadas las palmeras con las que se elaboran las artesanías, puede abrir nuevas puertas a mercados más exigentes que prioricen la trazabilidad de los productos, sabiendo que con su compra contribuyen con familias que están generando menos presiones al bosque y cuidando un área de inigualable valor biológico.

Asegurar los medios de vida de las poblaciones asentadas en áreas prioritarias para la conservación, donde tanto las personas y la naturaleza puedan prosperar de la mano, es el camino hacia la sostenibilidad.

© Conservación Internacional/Gustavo Carrasco

La tienda Garza Viva (Jirón Nauta 136, Iquitos) exhibe artesanías hechas con fibra de chambira de las comunidades del Ampiyacu Apayacu.